[...]‘Desde allí se lanzaban hacia los lejanos valles. En vez de sufrir al caer sobre las rocas, parecia que cada obstáculo en el cauce del torrente se consideraba como objeto a vencer y esa hermosa oportunidad de encontrar un camino por encima o alrededor de este.
Una vez que continúes tu viaje puede haber mucha niebla y nubes. Hasta quizá parezca como si cada cosa que has visto aquí en los Lugares Altos fuera solo un sueño o el fruto de tu propia imaginación. Sin embargo, has visto la realidad y la niebla que parece que se lo traga todo es la ilusión [...] Recuerda Miedosa, lo que viste antes de que la niebla lo bloqueara todo. Nunca dudes de que los Lugares Altos están allí, elevándose por encima de ti, en la seguridad de que sin importar pase lo que pase te llevaré allí arriba tal y como te lo prometí.
Atrevete a comenzar a ser feliz Miedosa, pues el tiempo está cerca ahora, y te daré el deseo de tu corazón.”[...]
Pies de ciervas en los lugares altos